SEMANA SANTA, PASCUA O EASTER
En estas fechas los cristianos celebran la muerte y resurrección de Jesús, los judíos la liberación de la exclavitud de su pueblo de Egipto, los paganos la llegada de la primavera y la fertilidad de la tierra tras el invierno, los niños dos semanas de vacaciones que nunca vienen mal y los padres y madres... se hacen cruces porque no saben que hacer con sus hijos estos días.
Las procesiones religiosas, con sus pasos, sus cruces, sus penitentes y sus nazarenos, se entremezclan con conejos de chocolate y huevos decorados, mezcla un tanto peculiar. Entre tanto fervor y sufrimiento religioso (que digo yo, si ya todos sabemos que al tercer día resucita...) nos endulzamos la vida y el paladar con los dulces típicos de la época como torrijas, o torrejas (en mi casa se han comido siempre por Navidad), buñuelos, huesos de santo y monas de pascua.
Es un período de recogimiento y oración, pero las playas del levante se llenan y Andalucía se colapsa de turistas que quieren ver sus procesiones y disfrutar de su sol... pero en Andalucía en Semana Santa llueve, que ya es casualidad ¿eh? Y tan típico como las saetas y las plañideras de Cristo, es ver a las plañideras del mal tiempo llorando porque después de llevar un año preparando su fiesta esta se estropea. Que sí, que es una auténtica faena pero hay que ser un poquito previsores ya ¿qué tal si ideamos un toldito y salimos a la calle con paragüas? Que ya, ya sé que no es lo mismo, pero mejor eso que nada. No creáis que no me tomo en serio el problema, es que vivir en el norte de España te hace inmune a las adversidades climatológicas.
Curioso es ver cómo todas las celebraciones religiosas (o al menos las más importantes que son las que yo conozco) coinciden con fiestas o celebraciones paganas que ya existían mucho antes. Cómo tradiciones ancestrales se van barajando con otras posteriores combinando sus historias hasta el punto de que al final parece la misma, y de la misma se acaban contando mil y una versiones.
Así pues, para unir y justificar todas estas historias y personajes religiosos y paganos nos encontramos con leyendas tales como que en el sepulcro de Jesús había un conejo, que al ver que Dios había resucitado salió a dar la buena nueva, y como no sabía hablar, lo hizo repartiendo huevos de colores. ¿Te imaginas que en la película de "La Pasión de Cristo" de Mel Gibson, después de 2 horas de cine gore y tomatina apareciese un alegre conejito repartiendo huevitos de colores?
Otro relato dice que el fue el mismo Jesús quién comenzó la tradición de repartir huevos como símbolo de nueva vida y con el tiempo se cambiaron por huevos de chocolate y se decoraron. Sabía lo de los panes y los peces, pero lo de los huevos nunca lo había oído.
Las interpretaciones paganas en cambio consideran que el conejo y el huevo son símbolos de fertilidad y por eso se regalan en Easter (del anglosajón Eostre que significa Abril y también es el nombre de la Diosa de la Primavera). Y nos dejan historias como que Eostre encontró un pájaro herido y lo convirtió en liebre para que pudiese sobrevivir al invierno, esta se dió cuenta de que podía poner huevos y cada primavera los decoraba y los dejaba como ofrenda a la diosa.
Yo te dejo con mi interpretación de la Semana Santa, Pascua o Easter en punto y ganchillo.
Las procesiones religiosas, con sus pasos, sus cruces, sus penitentes y sus nazarenos, se entremezclan con conejos de chocolate y huevos decorados, mezcla un tanto peculiar. Entre tanto fervor y sufrimiento religioso (que digo yo, si ya todos sabemos que al tercer día resucita...) nos endulzamos la vida y el paladar con los dulces típicos de la época como torrijas, o torrejas (en mi casa se han comido siempre por Navidad), buñuelos, huesos de santo y monas de pascua.
Es un período de recogimiento y oración, pero las playas del levante se llenan y Andalucía se colapsa de turistas que quieren ver sus procesiones y disfrutar de su sol... pero en Andalucía en Semana Santa llueve, que ya es casualidad ¿eh? Y tan típico como las saetas y las plañideras de Cristo, es ver a las plañideras del mal tiempo llorando porque después de llevar un año preparando su fiesta esta se estropea. Que sí, que es una auténtica faena pero hay que ser un poquito previsores ya ¿qué tal si ideamos un toldito y salimos a la calle con paragüas? Que ya, ya sé que no es lo mismo, pero mejor eso que nada. No creáis que no me tomo en serio el problema, es que vivir en el norte de España te hace inmune a las adversidades climatológicas.
Curioso es ver cómo todas las celebraciones religiosas (o al menos las más importantes que son las que yo conozco) coinciden con fiestas o celebraciones paganas que ya existían mucho antes. Cómo tradiciones ancestrales se van barajando con otras posteriores combinando sus historias hasta el punto de que al final parece la misma, y de la misma se acaban contando mil y una versiones.
Así pues, para unir y justificar todas estas historias y personajes religiosos y paganos nos encontramos con leyendas tales como que en el sepulcro de Jesús había un conejo, que al ver que Dios había resucitado salió a dar la buena nueva, y como no sabía hablar, lo hizo repartiendo huevos de colores. ¿Te imaginas que en la película de "La Pasión de Cristo" de Mel Gibson, después de 2 horas de cine gore y tomatina apareciese un alegre conejito repartiendo huevitos de colores?
Otro relato dice que el fue el mismo Jesús quién comenzó la tradición de repartir huevos como símbolo de nueva vida y con el tiempo se cambiaron por huevos de chocolate y se decoraron. Sabía lo de los panes y los peces, pero lo de los huevos nunca lo había oído.
Las interpretaciones paganas en cambio consideran que el conejo y el huevo son símbolos de fertilidad y por eso se regalan en Easter (del anglosajón Eostre que significa Abril y también es el nombre de la Diosa de la Primavera). Y nos dejan historias como que Eostre encontró un pájaro herido y lo convirtió en liebre para que pudiese sobrevivir al invierno, esta se dió cuenta de que podía poner huevos y cada primavera los decoraba y los dejaba como ofrenda a la diosa.
Yo te dejo con mi interpretación de la Semana Santa, Pascua o Easter en punto y ganchillo.
Cristiano o pagano, lo celebres de la forma que quieras o no lo celebres, llueva o haga sol, espero que disfrutes de estos días.
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